Tan ansiado día por fin llegaba. Como te cantaron durante tu andar,
llegaste desde Almería y en Sevilla quisiste anidar. Virgen del Mar cómo extrañábamos tu
caminar por las calles de nuestra ciudad.
Templete de plata que te protegía a Ti y
a tu amado Hijo. Flores blancas de pureza. Espejos en el paso el cual portaban valientes
costaleros en el que cada uno de los asistentes se veía reflejado. Siempre la mirada arriba. Siempre
mirándote a Ti, Madre.
A tu paso por el Convento de Santa Ángela
de la Cruz las voces de aquellos bellos ángeles hacían enmudecer a toda la
calle. Pareciese pues que el tiempo se había
detenido para guardar en la memoria de todos tan mágico momento.
A tu espalda, en tu manto, personas
postradas en una silla de ruedas nos daban una lección de fe a todos. No importa en qué situación nos
encontremos que siempre iremos a reunirnos contigo. Caía la noche cuando regresaste a casa y,
un año más, empezamos la cuenta atrás para poder verte pasear a los sones de una
banda que lo dio todo por y para Ti.
Déjenos acercarle a través de esta
galería fotográfica a la procesión de la Virgen del Mar por el Pozo Santo.
Disfruten.
